Las criptomonedas son el sostén financiero de organizaciones ilícitas en todo el mundo. Solo el año pasado, se enviaron al menos 24.200 millones de dólares a direcciones de wallets o carteras cripto vinculadas a estas.
Son fondos relacionados con estafadores, terroristas y grupos que comercializan material sobre abuso infantil, señala el último reporte de la firma de investigación Chainalysis.
Las criptomonedas les permiten a los delincuentes saltarse casi todos los controles del sistema financiero convencional. La tecnología blockchain todavía ofrece cierto anonimato a quienes envían y reciben dinero por esta vía, identificados únicamente por las direcciones de sus billeteras.
Chainalysis dijo que los 24.200 millones de dólares reportados son una subestimación, y que es probable que el monto aumente a medida que identifiquen más direcciones ilícitas.
Ya sucedió en su informe de 2022. Habían estimado un volumen de transacciones de 20.600 millones de dólares, pero esa cifra finalmente alcanzó los $39.600 millones.
La mayoría de estas direcciones están asociadas a entidades o países sancionados por Estados Unidos por delitos vinculados con el financiamiento del terrorismo o el lavado de dinero. Por ejemplo, fondos relacionados con Irán y Rusia.
Combinadas, estas direcciones sumaron un estimado de 14.900 millones de dólares en 2023, el 61,5 % de todo lo reportado por los expertos.
Fuente: hipertextual.com









