El gobierno de Suiza vuelve a marcar el ritmo en materia de regulación cripto. El Consejo Federal aprobó una prórroga clave que extiende hasta finales de 2027 la validez de una ordenanza transitoria que regula el intercambio automático de información fiscal sobre criptoactivos.
Este movimiento no solo busca dar más margen a los actores del ecosistema digital suizo. También permite al país adaptar su legislación interna a los próximos estándares internacionales sobre transparencia fiscal y criptomonedas, que aún se encuentran en desarrollo. De momento, el Marco de Información Criptoactiva (CARF, por sus siglas en inglés), impulsado por la OCDE, aún no ha sido implementado de forma global.
Regulación cripto en Suiza: foco en el intercambio de datos
La ordenanza vigente, cuya validez expiraba en diciembre de 2025, ahora tendrá efecto hasta el 31 de diciembre de 2027. Esta medida transitoria exige a los intermediarios cripto suizos recopilar y conservar información fiscal de sus clientes, en línea con la normativa de la OCDE y los compromisos de intercambio automático de datos firmados por Suiza.
El objetivo de fondo es evitar el uso de criptoactivos para la evasión fiscal, manteniendo al mismo tiempo el atractivo del país como hub para proyectos Web3 y fintech. La extensión brinda claridad a exchanges, wallets y plataformas con base en Suiza, que ven en esta decisión un respaldo normativo para planificar operaciones a mediano plazo.
Suiza ratificó en agosto de 2024 su adhesión a los nuevos estándares de reporte cripto de la OCDE. Además, ya participa en la Red Global de Intercambio de Información para propósitos fiscales junto con más de 120 jurisdicciones.
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